10 Jul Monitor no invasivo puede diagnosticar insuficiencia cardíaca en tiempo real
CorAlert una startup de Israel está desarrollando un monitor no invasivo que puede diagnosticar insuficiencia cardíaca en tiempo real
Sensores en el brazo y el pecho, y un algoritmo creado por la empresa logran una generar una estimación de la presión ventricular final diastólica (LVEDP), un indicador de la insuficiencia cardíaca.
La presión ventricular extrema-diastólica izquierda (LVEDP), la presión en el ventrículo izquierdo después de que se ha llenado de sangre y antes de contraer, es una medida aceptada para identificar a pacientes que sufren de IC.
En casi todas las personas con HF, LVEDP es elevado. Lamentablemente, medir LVEDP implica un procedimiento invasivo que rara vez se realiza hoy en día.
CorAlert está desarrollando un dispositivo exacto, fácil de usar, no invasivo para la detección temprana y el monitoreo de HF en tiempo real.
El dispositivo de CorAlert estima con precisión LVEDP basándose en el análisis de la presión aórtica central y la medición de los latidos cardíacos.
El sistema inteligente de CorAlert colocada en la parte superior del brazo, con un sensor colocado en el pecho y software propietario de CorAlert realiza estimaciones precisas y análisis de LVEDP.
El método no invasivo de la startup proporciona un perfil hemodinámico completo basado en tres medidas críticas:
LVEDP
Delta Presión
Delta Tiempo (dP / dt)
Para ver el video hacer click en el link https://youtu.be/nMYxyXJpKSo
Este último estima la tasa de aumento de presión en la aorta directamente después de la contracción y apertura de la válvula aórtica. La Resistencia Vascular Sistémica (SVR) es la resistencia que debe superarse para empujar la sangre a través del sistema circulatorio y para crear flujo sanguíneo.
CorAlert representa un nuevo enfoque en la práctica de la cardiología que mejorará significativamente el cuidado de los pacientes y reducirá los costos hospitalarios.
Su solución única ha sido validada en más de 50 pacientes en el Hospital Johns Hopkins, seguido de un estudio en los Centros Médicos Kaplan y Ziv en Israel.
Fuente: Latam Israel