28 Feb Violinista israelí crea “Sinfonía de la Hermandad”

La música israelí, apodada la “violinista de hip-hop”, actuará con un coro de góspel.

Por Menachem Wecker, JNS.org

Miri Ben-Ari. (Michal Fattal/Flash90)

Miri Ben-Ari comenzó a estudiar violín a los 5 años. “Crecí en una burbuja de música clásica”, dijo la música israelí-estadounidense a JNS. “No sabía nada excepto música clásica cuando era niña. Tenía una formación tan clásica que recibí mi primer buen violín de Isaac Stern”.

Si la ganadora del premio Grammy de 44 años pudiera decirle a su yo más joven qué tipo de música hace e interpreta hoy, esta última no lo creería. “Ni siquiera sabía sobre la música hip-hop cuando era niña”, dijo.

Eso se debe a que Ben-Ari es conocida como la «violinista del hip hop», ya que se ha presentado con Kanye West, Jay Z, Wynton Marsalis, John Legend y otros. Ha actuado en los medio tiempo de juegos de la NBA y en el encendido anual de la Menorá Nacional dirigida por Chabad-Lubavitch en Washington, D.C., y en el Carnegie Hall y la Casa Blanca.

Antes del concierto «Sinfonía de la Hermandad» del 26 de febrero en la Iglesia Catedral de Wells en Newark en honor al Mes de la Historia Negra – un evento que la Comisión Nueva Jersey-Israel está copatrocinando con la Iglesia Pentecostal de Dios en Cristo – dijo Ben-Ari JNS sobre su viaje musical, sobre ganar un Grammy con Kanye West por la canción «Jesus Walks» y sobre cómo es, como sobreviviente del Holocausto de tercera generación, combinar el violín clásico y los sonidos del Medio Oriente con el hip hop, el góspel y otras formas.

Durante su servicio militar en Israel, Ber-Ari dijo que se enamoró del jazz, particularmente de su naturaleza de improvisación. Si pudiera improvisar, podría hacer casi cualquier cosa, pensó, incluso forjar su propio estilo.

Se mudó a los Estados Unidos y descubrió que la escuela de música no iba con ella. “El mejor estudio está sobre el escenario”, dijo a JNS.

Blue Note Records la contrató para tres álbumes de jazz y pronto atrajo la atención de algunas de las mejores estrellas. Marsalis formaba parte de la tercera. “Realmente pude tocar con los mejores”, dijo.

Luego conoció al músico haitiano Wyclef Jean. “Él fue quien me tituló la ‘violinista de hip-hop’. Jay-Z y Kanye West me presentaron la escena del hip hop, y mi carrera explotó en el escenario del Apollo a principios de 2000”, dijo.

Isaac Stern, quien murió en 2001 – justo cuando la carrera decididamente poco clásica de Ben-Ari estaba despegando – no llegó a experimentar su combinación musical característica. Pero Stern la apoyó con una beca. “Fue muy dulce”, dijo Ben-Ari.

En un momento, Ben-Ari también fue llamada «la chica mala del violín», le dijo a JNS. “Pero debido a que tengo una formación tan clásica, nadie podría odiarme y decir: ‘Oye. Ella no sabe tocar, por eso está haciendo esta música’. No. Aprendí violín de la mejor de la mejor manera”.

“Practiqué todos mis Paganinis”, dijo sobre el violinista y compositor italiano del siglo XIX Niccolò Paganini. “Vengo de allí. Así que no podrías decir que elegí el hip hop porque era fácil, ni nada por el estilo. No. Es realmente lo que quería hacer”.

La música de Ben-Ari se trata tanto de producir como de interpretar, por lo que compararla con tocar música clásica sería como manzanas y naranjas, dijo. Para el evento del domingo, que incluirá música góspel con un coro, está trazando un nuevo territorio incluso para ella.

“Lo he hecho con Kanye West, en realidad. Hemos hecho conciertos en los que usó un coro. Y le encantaba usar coros”, dijo. “Pero cuando Kanye usó un coro, él era el artista destacado. Ahora soy yo la artista destacada. Es un enfoque completamente diferente”.

 “La música tiene el poder de unir”

JNS preguntó qué hizo Ben-Ari con la crítica de que los músicos deben permanecer en sus propios «carriles» y que tomar prestado de otros es «apropiación», y no la forma más alta de adulación.

Ella respondió que este es un problema mayor para los vocalistas y raperos, no para un violinista purista.

“Escuché esto en relación con Eminem, por ejemplo”, dijo. “Es todo lo contrario porque traigo el violín y lo conecto con otro mundo. Así que no lo cambio. Estoy tocando un violín muy clásico. Y yo soy una purista”.

“Nunca perdí mi autenticidad. Nunca olvidé el hecho de que soy una violinista clásica. Nunca olvidé el hecho de que crecí en Israel. Nunca tuve que lidiar con ninguna de estas críticas. Al contrario, todos los mundos a los que llego me han abrazado”, dijo. “Tengo una carrera gracias a la comunidad negra. Me aceptaron primero”.

Su identidad como israelí y sobreviviente del Holocausto de tercera generación es muy importante para ella. A los 12 años, se enteró de la historia de su familia durante la Segunda Guerra Mundial. “Mi familia vino de una gran lucha”, dijo. “Tuve que cargar su historia toda mi vida”. (En 2006, cofundó la organización sin fines de lucro de educación sobre el Holocausto Gedenk, «recordar» en yiddish). “Cuando vienes del dolor, tu viaje es más significativo. Tu sonido es más conmovedor”.

Como había mencionado a tantos músicos famosos que eran colegas y había mencionado a West varias veces, se le preguntó a Ben-Ari cómo los raperos, y el que ahora se hace llamar «Ye», en particular – la tomaron como israelí.

“La política es para los políticos, y hay suficientes haciendo lo que están haciendo”, dijo. “La música tiene el poder de unir. Es otro medio completamente diferente”.

Se le recordó que así como la música da, también quita; puede unir y dividir. Y los músicos pueden ser fuerzas de unidad o de odio.

“De hecho, tuve una gran experiencia trabajando con Kanye. Trabajé con él cuando su madre aún vivía y, por lo que escucho, según todo lo que leo, tal vez sea un Kanye diferente”, dijo. “Solo puedo decir que mi experiencia fue genial. Pasé más tiempo en el estudio con él que con cualquier otro artista”.

“Siempre me trataron con el máximo respeto. Realmente, no tengo más que grandes recuerdos de este viaje”, dijo. “Leer esto me pone muy triste porque conozco a un Kanye diferente. … Solo digo ‘¿Qué pasó?’ ”

La actuación del domingo, que también contará con los músicos de góspel Derrick Starks y Melanie Daniels, es como los servicios religiosos en los que Ben-Ari actuó con West. Este evento, sin embargo, reunirá a las comunidades judía y negra, con el coro de góspel listo para cantar «Eretz Zavat Halav U’Dvash» («Tierra de leche y miel que fluye»).

“Todos vamos a disfrutar de la música. Vamos a cantar. Vamos a levantarnos. Nos vamos a conectar con el poder de la música”, dijo. “La música realmente te lleva a otra zona”.

Traducción: Consulado General H. de Israel en Guayaquil
Fuente: United with Israel
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