Se celebra el funeral del duodécimo niño muerto en un ataque con cohetes de Hezbollah contra un campo de fútbol del Golán


Dolientes llevan el ataúd de Gevara Ebraheem, de 11 años, muerto en un ataque con cohetes de Hezbollah el 27 de julio contra la ciudad drusa de Majdal Shams, el 29 de julio de 2024 (AP Photo/Leo Correa)

Un familiar de Gevara Ebraheem, de 11 años, dice que la tragedia ha «sacudido nuestros corazones»; Gallant: No hay diferencia entre los niños judíos muertos en el sur el 7 de octubre y los niños drusos muertos en el norte.

POR: Personal de ToI

El duodécimo niño muerto en un ataque con cohetes de Hezbollah contra un campo de fútbol en Majdal Shams fue enterrado el lunes en la ciudad drusa, un día después de los funerales de las demás víctimas.

Cientos de dolientes asistieron a la ceremonia por Gevara Ebraheem, de 11 años. Un familiar dijo que la tragedia había «sacudido nuestros corazones».

Según el diario Haaretz, el niño publicó en su página de Facebook el 15 de octubre, días después del comienzo de la guerra, que «no queremos la guerra, queremos vivir en paz».

A Ebraheem le sobreviven sus padres y su hermano menor.

El niño había sido considerado desaparecido durante unas 24 horas tras el ataque del sábado por la tarde en el norte de Israel, en el que murieron otros 11 niños, todos los cuales se encontraban en un campo de fútbol cuando impactó el cohete de fabricación iraní, que los mató antes de que pudieran ponerse a salvo.

La policía dijo el domingo por la noche que los nuevos hallazgos en el lugar del ataque habían confirmado que Ebraheem también había muerto, poniendo fin a la esperanza de su familia de que hubiera huido del lugar del ataque y sobrevivido.


Gevara Ebraheem, de 11 años, muerto en un ataque con cohetes desde Líbano contra la localidad drusa de Majdal Shams, en los Altos del Golán, el 27 de julio de 2024. (Cortesía)

El jefe del Consejo Regional de Ein Qiniyye, Wael Mugrabi, pariente de Ebraheem, declaró al Canal 12 que el niño «simplemente había desaparecido». Inicialmente se había dicho a la familia que el niño había sido trasladado al Centro Médico Ziv de Safed, pero la información resultó ser incorrecta, dijo.

El misterio en torno a su paradero se vio agravado por el hecho de que las cámaras del campo de fútbol que podrían haber proporcionado pistas quedaron destruidas por la explosión. Algunos suponen que la explosión pudo haber borrado su pequeño cuerpo, dificultando su identificación.

«El misil probablemente le alcanzó directamente», dijo a Ynet un miembro del consejo local. «El instructor de fútbol dijo que sin duda estaba con todo el grupo de niños que fueron alcanzados».


Ancianos y dolientes rezan junto al ataúd de Gevara Ebraheem, de 11 años, muerto en un ataque con cohetes de Hezbolá contra la ciudad drusa de Majdal Shams el 29 de julio de 2024 (Jalaa MAREY / AFP)

El domingo se celebraron funerales por las otras 11 víctimas, 10 de ellas en Majdal Shams, en la ladera sur del monte Hermón, en los Altos del Golán, y una en la cercana Ein Qiniyye, en medio de una mezcla de dolor y rabia en la devastada comunidad drusa.

Las banderas negras ondearon en las farolas de Majdal Shams y de los pueblos drusos circundantes de Buq’ata y Masa’ada, y todos los comercios locales cerraron el domingo durante los funerales. Miles de lugareños y visitantes de más allá del Golán, la mayoría vestidos de negro, llenaron el centro de la ciudad mientras se conducían los féretros blancos de las víctimas.

En una reunión del gabinete de seguridad celebrada el domingo por la noche, los ministros autorizaron al primer ministro Benjamin Netanyahu y al ministro de Defensa Yoav Gallant a decidir la escala y el momento de la respuesta de Israel al ataque.


(Fila superior, de izq. a dcha.) Ameer Rabeea Abu Saleh, de 16 años; Iseel Nasha’at Ayoub, de 12 años; Hazem Akram Abu Saleh, de 15 años; Milad Muadad Alsha’ar, de 10 años. (Fila intermedia, de izq. a dcha.) Alma Ayman Fakher Eldin, de 11 años; Naji Taher Alhalabi, de 11 años; Johnny Wadeea Ibrahim, de 13 años, Yazan Nayeif Abu Saleh, 12 (Fila inferior, de izquierda a derecha) Fajer Laith Abu Saleh, 16, Vinees Adham Alsafadi, 11 Nathem Fakher Saeb, 16, y Gevara Ebraheem, 11, que murieron en un ataque con cohetes de Hezbollah contra Majdal Shams el 27 de julio de 2024.

El lunes, Gallant realizó una segunda visita a Majdal Shams desde el ataque, donde dijo a las familias en duelo que Hezbollah pagaría el precio del ataque.

«Para mí, no hay diferencia entre un niño judío asesinado en el sur de Israel el 7 de octubre y un niño druso asesinado en los Altos del Golán. Es lo mismo, son nuestros niños», dijo Gallant a los dolientes.

«Haremos todo lo posible para restablecer la seguridad y permitir que la vida continúe como debe. Hezbollah pagará un precio por esto: nuestras acciones lo dirán todo», añadió.

Hezbollah dijo el sábado que había lanzado un cohete Falaq contra una base de las FDI cerca de Majdal Shams, aunque una vez que surgieron informes de víctimas civiles en la ciudad del norte, el grupo terrorista cambió de rumbo y negó su implicación.


El ministro de Defensa, Yoav Gallants (izquierda), visita a las familias en duelo en la aldea drusa de Majdal Shams, en el norte del país, tras la muerte de 12 niños en un ataque con cohetes de Hezbollah el fin de semana del 29 de julio de 2024. (Elad Malcha/Ministerio de Defensa)

Con Israel amenazando con un duro ataque de represalia y las tensiones ya elevadas tras casi 10 meses de ataques casi diarios con cohetes contra el norte de Israel, muchos en Líbano se preparaban para la respuesta de Israel, entre temores de que una represalia de Hezbollah pudiera llevar a la región a una espiral de guerra total.

Hasta ahora, las escaramuzas se han saldado con 24 civiles muertos del lado israelí y 18 soldados y reservistas de las FDI. También se han producido varios ataques desde Siria, sin heridos.

Hezbollah ha dado el nombre de 382 miembros muertos por Israel durante las escaramuzas en curso, la mayoría en Líbano, pero algunos también en Siria. En Líbano han muerto otros 68 operativos de otros grupos terroristas, un soldado libanés y decenas de civiles.

 

Traducción: Consulado General H. de Israel en Guayaquil
Fuente: The Times of Israel

 



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