01 Ago La eliminación de Ismail Haniyeh: un acontecimiento significativo pero no decisivo
Por Yohanan Tzoreff
Ismail Haniyeh Foto: Amin Ahouei / Tasnim News CC BY 4.0
La eliminación del presidente del Buró Político de Hamás, Ismail Haniyeh, es sin duda un acontecimiento significativo.
Haniyeh ha dirigido la organización desde 2017, cuando fue elegido presidente y nuevamente en 2021, tras ser reelegido.
Todavía es demasiado pronto para determinar cómo afectará su muerte a la guerra y a Hamás como organización, pero el momento en medio de la guerra y tras la eliminación del oficial de alto rango de Hezbollah, Fuad Shukr, en el Líbano, así como del segundo de Haniyeh, Saleh al Arouri, hace varios meses podría tener un efecto acumulativo.
Hay que recordar que Haniyeh nunca fue el número uno de la organización.
En la corta historia de Hamas, nunca ha habido nadie cuyo estatus haya sido reconocido y aceptado por encima de todos los demás, excepto Ahmed Yassin.
Esto también muestra la naturaleza de la organización y quizás el secreto de su supervivencia: tener una base popular muy amplia y tomar decisiones cardinales por consenso y responsabilidad compartida.
Hamás encontrará rápidamente un sustituto de Haniyeh y continuará su camino adaptándose a las necesidades del momento.
Vale la pena señalar que después de la eliminación de Yassin, hubo un giro que llevó a la participación de Hamás en las elecciones de 2006, en contraste con su oposición a participar en las elecciones de 1996.
La pregunta es si después de diez meses de guerra sangrienta, ¿puede un evento de este tipo generar una nueva forma de pensar en Hamás?
Todavía es demasiado pronto para decirlo, y cualquier evaluación al respecto antes de la liberación de los rehenes y el fin de la guerra sería prematura.
Pero como se mencionó, el efecto acumulativo que puede influir en Israel en una dirección positiva también tiene importancia.
En lo que respecta a Irán, la eliminación de Haniyeh revela sus debilidades como patrocinador, incapaz de proteger a los aliados que acoge, sus vulnerabilidades en materia de inteligencia y su gran arrogancia.
Fuente: Aurora Digital
