21 Feb Conectados para siempre: la familia de un oficial caído de las Fuerzas de Defensa de Israel conoce a una niña salvada gracias a la donación de un riñón
La donación de órganos de Rebecca Baruch le dio a Rana, de 10 años, una segunda oportunidad de vida, uniendo a dos familias.
Capitana Rebecca Henrietta Johanna Baruch z»l. (Crédito de la foto: CORTESÍA DE LA FAMILIA)
El martes tuvo lugar un emotivo encuentro entre la familia de la fallecida capitana de las FDI Rebecca Henrietta Johanna Baruch y Rana, de 10 años, quien recibió un riñón gracias a la donación de órganos de Rebecca.
La familia de Rebecca –sus padres, Sasha y Robert, y sus hermanos, Asher y Margalit, llegaron desde los Países Bajos para conmemorar el primer aniversario de su fallecimiento.
De izquierda a derecha: Rana, de 10 años, el padre de Rebbeca y el padre de Rana. (Crédito: CORTESÍA DE LA FAMILIA)
Rebecca, que hizo aliá específicamente para alistarse en las Fuerzas de Defensa de Israel y contribuir al país, enfermó trágicamente de una enfermedad infecciosa y falleció. “Rebecca quería donar sus órganos; lo sabíamos. También era el deseo de todos nosotros”, dijeron sus padres, Sasha y Robert.
Mientras Robert hablaba de Rebecca, que era una estudiante brillante con fuertes principios, los padres de Rana señalaron que ella también es una excelente estudiante.
La enfermedad renal de Rana fue descubierta por casualidad cuando tenía cuatro años. Después de un período de tratamiento, tuvo que ser conectada a una máquina de diálisis. Le resultaba difícil soportar las restricciones alimentarias, por lo que sus padres se abstenían de comer y beber delante de ella para evitarle frustraciones.
Margalit, hermana de Rebbeca, y Rana
Rana empezó a asistir a la escuela hace apenas seis meses, tras recuperarse del trasplante. Ahora, su padre, que solía acompañarla desde su casa en el sur hasta los tratamientos de diálisis en el centro de Israel, puede finalmente regresar al servicio militar de reserva, que tuvo que suspender para cuidar de su hija.
Los padres de Rebecca preguntaron por las restricciones alimentarias de Rana después del trasplante. “Ahora comemos todos juntos y a Rana le encanta la maqluba”, dijeron.
Al final de la reunión, decidieron reunirse nuevamente durante la próxima visita de la familia a Israel, esta vez en la casa de Rana, para compartir una comida de maqluba de cordero con arroz y verduras.
Durante la sesión de fotos, el padre de Rana compartió que ellos también pertenecen a la comunidad de familias de militares en duelo. Concluyó diciendo: “Ahora, todos nosotros, ustedes y nosotros, somos un solo cuerpo con el riñón de Rebecca”.
Traducición: Consulado H. de Israel en Guayaquil
Fuente: The Jerusalem Post
