Día de la Desertificación: Cómo Israel podría ayudar a resolver la crisis de la desertificación

«Hay esperanza», dijo Nicole Hod-Stroh. “El Neguev de Israel está liderando esta esperanza y debería ser una fuente de orgullo nacional”.

 Por Maayan Jaffe-Hoffman


En el desierto de Neguev, la innovación israelí ofrece al mundo formas de construir cultivos resilientes, tecnologías del agua, energía limpia y otras herramientas.
Aquí se muestra un campo de energía solar. (Foto: DESERTECH)

Más de dos mil millones de personas viven en desiertos y tierras secas, lo que representa casi el 40 % de la superficie terrestre del planeta. La expansión del desierto – la desertificación – podría tener impactos severos y negativos en la vida de estas personas, incluida la seguridad alimentaria, la salud, la biodiversidad y más.

El sábado, el mundo conmemoró el “Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía”. Israel está a la vanguardia de la mitigación de la desertificación. En el desierto de Neguev, la innovación israelí ofrece al mundo formas de construir cultivos resilientes, tecnologías del agua, energía limpia y otras herramientas.

“Hay esperanza”, dijo Nicole Hod-Stroh. “El Neguev de Israel está liderando esta esperanza y debería ser una fuente de orgullo nacional”.

Hod-Stroh es directora ejecutiva de Merage Foundation Israel, miembro de la junta del Instituto de Innovación de Israel (III) y socio fundador de DeserTech Community, una iniciativa conjunta de Merage Foundation, III, el Ministerio de Protección Ambiental y la Universidad Ben Gurión del Neguev.

La idea es fomentar el espíritu empresarial y la innovación para resolver cuatro de los desafíos más importantes del desierto: temperaturas extremas, escasez de agua, comunidades remotas y degradación del suelo.


Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía (Foto: CORTESÍA/DOTS)

Desarrollo de la comunidad DeserTech

La idea de construir una comunidad DeserTech oficial se planteó hace varios años cuando el actual ministro de Economía e Industria, Nir Barkat, entonces alcalde de Jerusalén, trajo repre

La idea era construir una comunidad de industrias e instituciones vinculadas – desde proveedores hasta universidades y agencias gubernamentales – en torno a lo que los representantes acuñaron DeserTech. La Comunidad DeserTech se lanzó formalmente hace tres años, dijo Hod-Stroh, y disfruta de una inversión anual de $3 millones de la Fundación Merage y el Ministerio de Protección Ambiental. Hace unos meses, la comunidad lanzó el sitio web DeserTech Marketplace, donde se presentan más de 80 startups relacionadas – principalmente en agricultura, agua, infraestructura y energía – y se pueden ubicar las empresas de acuerdo con los desafíos que están tratando de resolver. La mayoría de las empresas están en el Neguev, pero no todas.

El año pasado, DeserTech Community y Start-Up Nation Central publicaron un mapeo de las empresas del país enfocadas en DeserTech, incluidas 66 empresas que se concentran en los desafíos de la desertificación como parte de su negocio principal. Además, otras 237 ofrecieron soluciones relacionadas. El informe mostró que la financiación de estas empresas iba en aumento: de 2017 a 2021, la financiación aumentó un 437 %, según el informe.

Aproximadamente el 17% de las startups de DeserTech eran del Neguev, mientras que solo el 2-3% de las startups israelíes, en general, son de la región.

El impacto de la Comunidad DeserTech ya se está notando.

A principios de este año, los países de la «Gran Muralla Verde» de las Naciones Unidas participaron en un programa conjunto entre la Comunidad DeserTech y la Convención de las Naciones Unidas para Combatir la Desertificación (UNCCD por sus siglas en inglés) para encontrar soluciones innovadoras para abordar sus desafíos más críticos relacionados con el desierto.

En marzo, Israel recibió a una delegación de expertos agrícolas africanos a través del programa, algunos de cuyos países no tienen relaciones diplomáticas con Israel.

“La desertificación y el cambio climático representan un peligro para muchos países. Israel está luchando contra esta amenaza en casa y brindando su experiencia y capacidades para beneficiar a África”, dijo el ministro de Relaciones Exteriores, Eli Cohen. “Seguiremos profundizando y fortaleciendo nuestros lazos con los países que quieran hacerlo por la prosperidad y para construir la estabilidad en la región”.

Los países que participan en el programa son los que se conocen como países sahelianos – naciones que se encuentran en el extremo sur del desierto del Sahara: Burkina Faso, Chad, Yibuti, Eritrea, Etiopía, Malí, Mauritania, Níger, Nigeria, Senegal y Sudán. Están trabajando juntos para restaurar 100 millones de hectáreas de tierra degradada para 2030, lo que capturará de manera simultánea y natural 250 millones de toneladas de carbono y creará 10 millones de empleos verdes.

La Comunidad DeserTech ofreció a los participantes talleres, sesiones de capacitación y viajes de campo para adquirir habilidades y conocimientos para identificar desafíos, evaluar tecnologías potenciales y escribir propuestas de proyectos concretos listos para implementar en sus respectivos países.

Hod-Stroh dijo que ya se identificaron soluciones y que ahora el programa está recaudando fondos de organizaciones internacionales e inversores para ayudar a implementarlas.

El Día de la Desertificación y la Sequía fue declarado oficialmente por la Asamblea General de las Naciones Unidas y su objetivo es promover la conciencia pública sobre los problemas, pero también “dejar que la gente sepa que la desertificación y la sequía se pueden abordar de manera efectiva, que las soluciones son posibles y que las herramientas clave para este objetivo yacen en el fortalecimiento de la participación comunitaria y la cooperación en todos los niveles”, dice el sitio web de la ONU.

La Fundación Merage se dio cuenta de que “Israel no tiene futuro si no desarrolla la periferia”, dijo Hod-Stroh. Pero el impulso es crear algo que no sea otro Tel Aviv.

“Con todas las diferentes instituciones de I + D en el Neguev, incluidas ocho instituciones agrícolas, BGU y sus Institutos Jacob Blaustein para la Investigación del Desierto, docenas de bodegas que han demostrado que se pueden cultivar viñedos en medio del desierto y expertos en el campo de la energía solar y la agricultura del desierto, tenemos pruebas de que podemos crear un ecosistema próspero en torno a la preservación del desierto.

“Ahora necesitamos conectar a estas partes interesadas con el resto del mundo”.

 

Traducción: Consulado General H. de Israel en Guayaquil
Fuente: The Jerusalem Post
https://www.jpost.com/environment-and-climate-change/article-746623?utm_source=jpost.app.apple&utm_medium=share

 



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