Médicos israelíes salvan a mujer embarazada y bebé de una ruptura arterial

El quirófano fue un campo de batalla para la vida de la madre y su hijo cuando se desarrolló una crisis en torno a una arteria rota en el bazo.

Por Judy Siegel-Itzkovich


Tatiana Cohen con su hijo en el Centro Médico Sourasky de Tel Aviv después de una cirugía que les salvó la vida. (Foto: Cortesía de Miri Gatenyu para el Centro Médico Sourasky de Tel Aviv)

Hace dos semanas, Tatiana Cohen, de 38 años, y su esposo llegaron a un hotel en Tel Aviv para celebrar su primer aniversario de bodas, pero esa noche romántica se convirtió en una batalla por la vida de Tatiana y el bebé en su útero.

“Fuimos juntos a un restaurante esa noche y cuando regresamos a la habitación del hotel, comencé a sentir fuertes dolores en el estómago y náuseas – aunque se suponía que iba a dar a luz en dos meses, tenía una una sensación interna que los dolores que tenía estaban relacionados con el embarazo y no con la comida que del restaurante. Inmediatamente llamé a la ambulancia que me llevó al Hospital de Mujeres y Maternidad Lis en el Centro Médico Sourasky de Tel Aviv”, recordó.

El equipo médico le realizó una serie de pruebas a Cohen, todas las cuales resultaron normales, pero debido a que tenía un dolor tan intenso, se decidió dejarla en el hospital para observación. Dos horas más tarde, hubo un giro dramático en su condición.

Un quirófano se convirtió en un campo de batalla por la vida de la madre y su hijo

La Dra. Eilat Dangout, la ginecóloga que estaba a cargo de la sala de partos en el mismo turno y que fue llamada para atender a Tatiana, describió cómo el quirófano se convirtió en un campo de batalla por la vida de la madre y su hijo: “Estaba al borde de desmayarse, así que me di cuenta de que era una verdadera emergencia. En una ecografía que le realicé se observó sufrimiento fetal, y a pesar de la prematuridad del feto, decidimos realizar una cesárea urgente. Los equipos médicos de los quirófanos, anestesia y parto llegaron rápidamente y, en unos minutos, saqué al bebé que necesitaba respiración y otros tratamientos. El tiempo es un factor crítico, y en casos de emergencia, si el tiempo de reacción no es rápido, las consecuencias pueden ser fatídicas e incluso costar la vida tanto de la madre como del recién nacido. Afortunadamente, el haber actuado rápidamente es lo que los salvó”.

Dangout explicó que un aneurisma de la arteria esplénica es un debilitamiento y expansión de la pared del vaso sanguíneo que alimenta el bazo. Esta es una condición muy rara que se identifica en menos del uno por ciento de la población. La ruptura de un aneurisma de este tipo es una emergencia potencialmente mortal que exige una intervención quirúrgica urgente y mata a aproximadamente una cuarta parte de los pacientes a los que se les diagnostica. El embarazo es un factor de riesgo para la ruptura de un aneurisma, y el riesgo de mortalidad aumenta en estas mujeres hasta alrededor del 75%. Alrededor del 95% de los fetos no sobreviven. No cabe duda de que se trata de un gran milagro, gracias al control de la paciente y al trato rápido y profesional de los mejores médicos del hospital”.


Tatiana Cohen con su hijo en el Centro Médico Sourasky de Tel Aviv después de una cirugía que les salvó la vida. (Foto: Cortesía de Miri Gatenyu para el Centro Médico Sourasky de Tel Aviv)

Durante la cesárea, el equipo médico detectó un sangrado masivo en su abdomen y llamó a más médicos del departamento de cirugía, incluido el Dr. Nadav Michaan, director de cirugía endoscópica de Lis, para localizar el origen del sangrado masivo.

El Dr. Eyal Hashavia, director de cirugía de emergencia que fue llamado desde su casa en la cercana torre de alojamiento del personal para salvar la vida de la madre, describió el caso. “De inmediato corrí al quirófano donde había una tremenda tensión durante los minutos que pasaron hasta que pudimos localizar el origen del sangrado. Se sintió como una eternidad. Luego de identificar que el sangrado provenía de una ruptura en la arteria esplénica, entendimos la magnitud de la complejidad de la operación. Sabíamos que teníamos que hacer todo lo posible para salvar la vida de Tatiana y que esté con su hijo recién nacido. Comenzamos con una operación de emergencia para abrir el tórax para la estabilización hemodinámica, luego de lo cual realizamos la resección del bazo y la cola del páncreas para detener el sangrado”.

El equipo médico pudo estabilizarla, pero Titana aún estaba en grave peligro y fue trasladada a la unidad de cuidados intensivos generales para recibir más tratamiento y observación mientras estaba sedada y ventilada.

A los pocos días de la operación, Tatiana y el bebé comenzaron a recuperarse rápidamente y de una manera que asombró a los médicos. Esta semana hubo un primer y emocionante encuentro entre los dos en la sala de bebés prematuros, y no quedó un ojo seco: “Todos estos días en el hospital, no creí que tenía un bebé y que estaba vivo. Fue solo cuando lo vi esta semana por primera vez y lo sostuve cerca de mí. No podía dejar de llorar de alegría por el milagro que nos pasó a los dos”.

Está previsto que la madre sea dada de alta del hospital en los próximos días, mientras que su hijo respira de forma independiente y está siendo tratado por el personal de la unidad de bebés prematuros. Se espera que él también sea dado de alta en las próximas semanas y se reúna con su familia”.

 

Traducción: Consulado General H. de Israel en Guayaquil
Fuente: The Jerusalem Post
https://www.jpost.com/health-and-wellness/pregnancy-and-birth/article-755474?utm_source=jpost.app.apple&utm_medium=share



advanced-floating-content-close-btnEste sitio web únicamente utiliza cookies propias con finalidad técnica, no recaba ni cede datos de carácter personal de los usuarios sin su conocimiento. Sin embargo, contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas a las de Consulado General Honorario de Israel que usted podrá decidir si acepta o no cuando acceda a ellos.